Comencemos
por el final.
El
análisis de Fukuyama en nuestros días no parece muy alejado de la
realidad. La Rusia Actual, muy liberal y cuyo control del gas parece
tornarse muy importante para el resto de Europa presenta una gran
variedad de nuevas ideologías de lo más estrafalarias entre las que
se incluyo el Nacional- Bolchevismo, tendencia ideológica que tiene
éxito en ciertos sectores de la juventud rusa. Esta nueva ideología
mutante y algunos dirían que antinatural (Yo no me atrevería a
decir que es muy distinta al simple lenninismo no tanto por mis
posiciones ideológicas sino por el resultado evidente que tuvo el
marxismo-lennismo en Rusia resumible en Gulags y Caza de brujas a la
rusa, en la que escucha música culta o simplemente extranjera era un
síntoma de decadencia burguesa para los guardianes de la buena moral
soviética.)
En
este nuevo marco en el que aparecen estas ideologías también
hallamos un conflicto con un alto componente racial, el caso
ucraniano que ahora parece ocupar buena parte de nuestros media. Y no
es casualidad que en una Crimea rusoparlante una Rusia renovada y
poderosa vean una nueva posibilidad de expansión. Y así es,
efectivamente, el expansionismo que parecía totalmente desacreditado
tras la caída del Tercer Reich ha vuelto ¡Y de qué manera! Así
como quién no quiere la cosa vuelve haber confictos en Europa. ¿Fin
de la historia?
¿Y
si ese mundo bipolar que supuestamente se acabó con la caída del
Muro de Berlín es necesario para un buen desarrollo de la economía
del mundo desarrollado? Es interesante ver como Rusia y China ahora
parecen hacer de contrapunto una vez más al poder estadounidense.
Está claro que ahora ya la riqueza no se mide tanto en tierras y en
control militar sino más bien en cuestiones económicas, una
consecuencia más del desarrollo del capitalismo.
Otra
cosa es decir que la superestructura ideológica no es consecuencia
del sistema económico sino al revés. Siempre a los que estudian
Marx les hace ruído esta idea. ¿Cómo es posible que no sean las
distintas sociedades las que eligen su sistema económico en base a
una ideología o manera de desarrollarse sino al revés? No olvidemos
,pero, que esas transformaciones económicas vienen de la mano de los
propietarios de los medios de producción, y así pues su ideología.
Al disponer ellos de los medios de producción y de una plusvalía
(otros dirían robo) justificada en su ideología también
desarrollan un complejo sistema de propaganda(Media), por el cual
pueden transmitirse tanto sus ideas como sus valores y sirven de
control social (Las iglesias de antes no son muy distintas a nuestros
actuales televisores) .
De
hecho, vivimos en un Occidente competitivo, en un Occidente en el que
te dicen que arriesgues para ganar, un Occidente que se hace valer de
nuevos heroes y símbolos como Steve Jobs. Steve Jobs quizás tampoco
sea tan distinto como lo fue San Felipe Neri para la cristiandad; Un
símbolo propagandístico de una serie de valores e ideas. Ahora se
pueden ver estos símbolos colgados de las paredes de algunos amantes
de la tecnología, no son pocos los cristianos que todavía tienen su
estampita de San Felipe Neri en la cocina.
¿Qué
simboliza Steve Jobs? Simboliza el esfuerzo, la perseverancia, la
lucha por superarse, por mejorar, ¿Por qué? Porque esa fue la vida
del personaje cuya imagen ha sido magnificada alrededor del globo
especialmente tras su muerte. Pero quizás en la ecuación no tenemos
en cuenta cuántas otras personas inspiradas por Steve Jobs o por
otros personajes relevantes han acabado fracasando fatídicamente. La
posibilidad de que uno pueda llegar a ser Steve Jobs son bajísimas
pero la superestructura ideológica te somete a la ficción de que no
sólo se puede, sino que el hecho de que se triunfe depende
exclusivamente del invididuo, redimiendo así el sistema económico.
Eso parece conducirnos a poder crear un nuevo tipo de persona, el
fracasado, aquel que no ha logrado sus metas. ¿Qué metas? A veces
para que un invididuo pueda ser libre o , por lo menos, vivir
decenemente parece tener que rechazar drásticamente cualquier
sistema de valores que decida estructurar su vida.
A
menudo se dice que esta transformación y exportación de la vida
burguesa a mayores capas de la sociedad parece una estrategia del
sistema capitalista para perpetuarse. En cierta manera, parece que es
necesario el conocimiento de la filosofía de Marx para entender la
situación actual. Debe de ser aquello que el filósofo no pudo
preveer. El triunfo total de los propietarios de los medios de
producción mediante el engaño. Lo que sí es discutible de la
superestructura ideológica vigente, actual y evidente en nuestro
mundo actual es qué pretende hacer el autor restándole importancia.
Quizás el autor no sospecha ni por un momento que él mismo está
trabajando para esa misma superestructura sin haberse percatado de
ello. No ha dejado de haber clases sociales, simplemente su
conciencia de clase ha sido anulada, y esto en Occidente, el ejemplo
más claro de la existencia de clases sociales es ese 80% de la
población mundial que tiene que estar mal para que nosotros sigamos
en un evidente letargo del consumismo.
M'encanta el darrer paràgraf.
ResponEliminaUna abraçada.